Un 30% de avance alcanza el estudio de restauración de la Basílica Corazón de María de Antofagasta, desarrollado por el Ministerio de Obras Públicas a través de la Dirección Regional de Arquitectura, según informó el seremi de Obras Públicas Patricio Labbé Lagunas, tras la realización de una actividad de participación ciudadana con la comunidad -modalidad on line por protocolos Covid- para mostrar los avances del proyecto de este importante patrimonio antofagastino.
El Vicario Parroquial de la Basílica Corazón de María, misionero claretiano, Haroldo Zepeda Urquieta, explicó que con casi 100 años que tiene el actual templo, presenta deterioros, desprendimientos y grietas, debido a los diferentes acontecimientos telúricos que lo han afectado.
“El 2014 se conformó un equipo de laicos comprometidos para enfrentar esta situación, asesorados por una empresa para lograr gestionar vías de solución. Este grupo fue creciendo, animado y apoyado por la comunidad. Se hicieron beneficios, se solicitó colaboración para poder pagar la documentación y estudios requeridos, hasta que logramos presentar este proyecto, tras cinco años de preparación”, relató el misionero claretiano, Haroldo Zepeda Urquieta.
La historia de este patrimonio nace en 1903, cuando los misioneros claretianos de la congregación Hijos del Inmaculado Corazón de María, fundan la Iglesia Sagrado Corazón de María en una capilla de madera a medio construir, la cual fue destruida por las llamas junto al colegio del mismo nombre, en 1912. Su reconstrucción se realizó en 1928 y dio paso al imponente templo que perdura hasta nuestros días, el que fue nombrado Basílica menor por el Papa Juan Pablo II, en el año 1999.
Miguel Calvo Flores, coordinador del Equipo Pro-restauración de la basílica Corazón de María, argumentó que este patrimonio se materializó a principios de siglo, tras el tratado de amistad entre Bolivia con Chile que permitió restaurar y construir la ciudad con obras de hormigón armado, siendo esta basílica parte de ese proceso -muy moderno para su época- comentó Calvo, quien narró que esta edificación destaca junto con otras, como la biblioteca regional y la Catedral.
“La gracia que tiene este lugar es que en sus inicios estaba alejado del centro, en la periferia. En ese contexto la comunidad claretiana realizó una actividad muy febril, con atención al hospital San José y la primera escuela privada, convirtiéndose en un punto de desarrollo urbanístico, lo que atrajo a mucha gente a vivir en los alrededores”, explicó Miguel Clavo.
Se destaca que durante toda la historia del templo, se ha albergado diferentes tipos de expresiones, como los bailes religiosos que cada 8 de diciembre veneran a la virgen con una procesión hasta la catedral. “También las universidades, colegios y diversas instituciones prestan el juramento, hay mucha actividad asociada a este patrimonio arquitectónico que se destaca en la ciudad”, enfatizó Calvo, quien sentenció que “hay que retomar la conciencia colectiva de lo importante que tiene este templo como un patrimonio físico e inmaterial”, puntualizó.
Restauración
Más de $216 millones provenientes de Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR) -provisión Puesta en Valor del Patrimonio- son los destinados para esta etapa inicial de diseño de restauración de esta emblemática infraestructura patrimonial de la comuna de Antofagasta, detalló el seremi del MOP, Patricio Labbé Lagunas, quien adelantó que “está programado el término del estudio para el primer semestre de 2022, el cual determinará las obras a ejecutar y el marco presupuestario de la iniciativa de restauración”, precisó Labbé.
El diseño considera una intervención sobre 1.141,30 metros cuadrados, con proyección de restauración del templo y mejoras en las instalaciones de la Capilla Mortuoria. También el estudio entregará una propuesta de modelo de gestión para el templo y sus instalaciones anexas.
La directora regional de Arquitectura del MOP, Amanda Vásquez Pinto, indicó que “esta es la segunda asamblea realizada -de carácter informativa y consultiva, según lo programado en el plan de participación ciudadana- la cual tuvo el objeto de informar los resultados del estudio de diagnóstico y mostrar los avances de la etapa de anteproyecto”, explicó Vásquez, quien señaló que además de las asambleas, también se han realizado una serie de talleres con la comunidad para que puedan aportar al estudio desde una mirada más local.