Subsecretario Galilea visitó obras del Hospital Regional de Antofagasta

20 de agosto de 2014

Sin inconvenientes avanzan las obras de construcción del nuevo Hospital Regional de Antofagasta, que a la fecha se encuentra en la etapa de fundación de los distintos pabellones de la futura edificación de salud, presentando un 2,2% de avance físico.

Así lo pudo comprobar el subsecretario de Obras Públicas, Sergio Galilea Ocón, en su visita a la Región de Antofagasta, quien estuvo acompañado del intendente Valentín Volta, el seremi de Obras Públicas, César Benítez y representantes del Gabinete Regional de Salud.

“Como subsecretario de Obras Públicas es muy importante estar acá, en una obra que está en sus inicios y en condiciones para terminar el segundo semestre de 2017. Hemos hecho y seguiremos haciendo un trabajo mancomunado entre Obras Públicas y Salud. Acá, el usuario y el mandante de esta obra tienen que estar metidos en todo el desarrollo de la misma y así lo vamos a hacer”, enfatizó el subsecretario.

Actualmente, la Sociedad Concesionaria Salud Siglo XXI S.A., a cargo de las obras, se encuentra trabajando en la cimentación de la obra gruesa, que corresponden a partidas ubicadas bajo el nivel del terreno para la instalación de los aisladores sísmicos, para lo cual ya instalaron dos de las siete grúas de edificación.

“Tenemos una empresa que muestra solidez en esta obra, con una cantidad de trabajadores que todavía es relativamente menor, pero que los próximos 15 días tendrá un mínimo de 200 trabajadores acá y en la etapa peack de la obra, se espera llegar a cerca de 1.500 trabajadores, donde esperamos, se maximice la mano de obra local con el grado de calificación que son requeridas para estas operaciones”, expresó la autoridad del MOP.

En total, el proyecto, cuya inversión supera los 180 mil millones de pesos, entre la construcción y el equipamiento, contempla una superficie construida que asciende a los 120.000 m2, y considera la inclusión de 45 boxes de consulta, 18 pabellones, 16 boxes dentales, 6 salas de parto asistido, 24 boxes de urgencia y 671 camas.

El intendente Valentín Volta puntualizó que: “Es tercera vez que venimos acá, pasando de un cero a un 2,2% de avance, aunque es muy poco, hacen la diferencia. Estamos contentos, porque estamos viendo una obra, que después de cuatro años de estancamiento, empezó a mostrar su expresión concreta como tal. Vamos a seguir haciendo visitas para determinados hitos, y como lo hemos señalado, estaremos encima de todas las obras públicas para evitar los retrasos y algunas situaciones de judicialización que se producen, para que las obras cumplan su cometido, que es servirle a la comunidad”.

La autoridad regional recalcó que se continuará trabajando en tres ámbitos de acción: Primero, que la gente recupere la fe pública, segundo, la realización de una fuerte inversión del gobierno regional en el actual hospital, en el cual se han invertido desde el 11 de marzo a la fecha, cerca de 7 mil millones de pesos, solo en equipamiento y mejoramiento. Y tercero, en continuar con la gestión del actual Hospital Regional, que va a ser parte de la red hospitalaria de la región junto a las nuevas edificaciones de Calama y Antofagasta.

“El segundo semestre de 2017 va a ser un antes y un después en materia de salud de la región. Vamos a tener éste (Antofagasta), el de Calama, complementados con los Servicio de Urgencia de Alta Resolutividad (SAR), los Cesfam, más el hospital clínico de la Universidad de Antofagasta tiene en proyecto en el sector sur de la ciudad”, enfatizó.

El nuevo hospital beneficiará a una población proyectada de 260 mil usuarios de la Región de Antofagasta, al que se agrega la demanda de alta complejidad desde Arica a Copiapó (referencia de la macro zona norte del país).

El seremi de Obras Públicas, César Benítez, manifestó que “Para nosotros, esta obra que estuvo dormida por cuatro años, es muy relevante no solo porque viene a mejorar la atención en salud, sino porque mejora las expectativas de vida de la comunidad”

Entre los beneficios del Proyecto se encuentra el aumento de la disponibilidad de camas en la región, con infraestructura hospitalaria y equipamiento médico de alto nivel y alta complejidad, permitirá reducir las brechas de atención.